PEREZA

Estaba perezoso. Con la de cosas que tenía que hacer. Anoche me fui a dormir tarde y el día hoy ha sido un cúmulo de obligaciones que había ido posponiendo y decidí que hoy lo haría todo, y así ha sido, y aún he tenido tiempo para tocar un poco los pinceles, es por generalizar lo de los pinceles, porque en realidad hoy he pintado con espátula. Así el día ha sido completito hasta incluso ahora que escribo el texto casi sobre la marcha. La verdad es que lo digo pero no me molesta en absoluto estar siempre liado y casi no tener tiempo para todo lo proyectado en el día. Reconozco que ahí me sale mi parte masoquista, o quizás es que prefiero ir falto de tiempo que vivir en un continuo aburrimiento, que por cierto alguna temporada así he tenido en mi vida y no la quiero para nada. Definitivamente mucho mejor tener siempre algo entre manos. Desde las nueve de la mañana. Desayunar en el centro, mirar la ropa de un par tiendas, y otras gestiones, incluso me dio tiempo a tomar un café con un amigo que encontré en la calle San Miguel que también iba de compras y como teníamos conversaciones pendientes pues no hemos desaprovechado el rato. Después en casa un almuerzo frugal, una ducha rápida y de nuevo a la calle. Tenía que recoger un material que necesito, en la tienda donde compro los materiales de pintura y pasar por la imprenta a recoger unas tarjetas de visita que ya hacía días que me habían avisado para que pasara a buscarlas. Al llegar a casa me he puesto a terminar un cuadro que me faltaba un rato de retoques, después un café con leche y mientras lo consumo a sorbitos aquí estoy liado con el texto para el blog, quizás no me salga demasiado original pero me siento bien por el deber cumplido. Aún sigo perezoso aunque no lo parezca, porque lo de la pereza es como una especie de estado de ánimo, pero cuando acabe con esto me voy a relajar mirando como crece la hierbabuena que tengo plantada en una maceta. Pensaba leer un rato antes de cenar, pero ya sera mañana si acaso cuando retome la lectura de "Transforma tu salud" de Xevi Verdaguer. Aquí en mi terraza el sol se va escondiendo por entre los bloques de pisos de enfrente y eso indica que se aproxima la hora de la cena, pues bien le haré caso al sol y me bajaré a preparar el ágape. Por cierto... Y a santo de qué he contado hoy todo esto?
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La fotografía que presento es una pintura sobre madera con acrílico, S/T, de medidas 120X80 cm. Año 2018.

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