MIEDO

Esa sensación de angustia ante un eventual peligro o perjuicio, ya sea real o imaginario, se llama miedo. El miedo nos atemoriza y nos bloquea, nos impide, nos detiene, nos perturba. El miedo nos produce, llanto, risa, bronca, etc. Es lógico, el miedo nos genera más miedo. Pocas sensaciones nos provocan tantas aristas como el miedo. Los hay pequeños, como el miedo a los fantasmas, al hombre del saco, a la oscuridad... Y los hay grandes, como el miedo a crecer, al futuro de nuestros hijos e incluso a la muerte. Son solo unos pocos ejemplos. Lo que evidencia todo esto es que debemos tenerle un poco de respeto al miedo. Aunque como dicen en mi pueblo, el miedo es libre y cada cual se coge el que quiere. Recuerdo que yo de niño era muy miedoso, pero con el paso de los años, que algo bueno debían de tener, la verdad soy mucho más selectivo con los miedos y no hay demasiadas cosas que me lo provoquen, aunque algunos hay, sin duda. Hay más tipos de miedos, se me ocurre el miedo a un nuevo trabajo, o a mostrarse como uno es, este es un miedo que encierra. Hay gente que puede tener miedo a las cucarachas o las palomas.... También hay miedos cobardes como por ejemplo a que te deje tu pareja. Miedos miedosos, como tener miedo a la muerte. El miedo muchas veces es sufrimiento. Yo creo que debemos ser valientes y afrontar el miedo y en la medida que podamos, echarlo fuera de nosotros. Ser valiente, también es decirle al miedo un irónico: ¡Uhhh, qué miedo! Ya lo sé, hay muchos más miedos, pero se me ha acabado el folio.
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La fotografía que presento es una pintura al óleo, S/T, de medidas 80X80Cm. Año 2000.

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